"Gracias a mis maestros, a Cristina Rota, que espero que me esté viendo, porque me enseñó a crear desde la particularidad, y no es fácil, pero ahí sigo Cris". Con estas palabras, entre otros emocionantes agradecimientos, Nathalie Poza recogía el Goya a la mejor actriz protagonista por su papel en No sé decir adiós. "El arte importa, si hay alguien ahí fuera, una chavala que quiera dedicarse a esto, ¡salta!, abraza tus heridas y conviértelas en una obra de arte porque merece la pena. No sé si salvaremos el mundo pero a mí este oficio me ha salvado la vida", señalaba.
Nathalie Poza, antigua alumna de la Escuela Cristina Rota, ganó el Goya a la mejor actriz protagonista por su papel en No sé decir adiós, la opera prima de Lino Escalera sobre las relaciones familiares y la dificultad de encarar la muerte. Se trata del primer Goya de su carrera y su cuarta nominación.
Nathalie Poza ha sido desde una edad muy temprana una apasionada del arte. Sus primeros pasos los dio con el piano y el ballet hasta que, a los 21 años, el teatro entró en su vida con el grupo Animalario. Tiempo después, entraba en la televisión con multitud de series como El comisario, Urgencias, Lex, Hispania la leyenda, Carlos Rey Emperador, La Catedral del Mar o actualmente en Traición.
En el mundo del cine debutó en 2002 con El otro lado de la cama, de Emilio Martínez Lázaro. Consiguió su primera nominación a los Goya como actriz revelación gracias a su papel en Días de fútbol. Repitió candidatura en 2005 con Malas temporadas de Manuel Martín Cuenca, como protagonista, y en 2013, como actriz de reparto en Todas las mujeres. En 2016 formó parte del reparto de Julieta, la última película de Pedro Almodóvar.
¡Enhorabuena!
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